Lo primero que tenemos que definir,
es que es una singladura. En el lenguaje de la marina es la navegación ininterrumpida
durante 24 horas, contando a partir de las 12, pero en nuestro caso este
termino hace referencia a Dirección real o imaginaria seguida por algo o alguien…
Por lo tanto con singladura energética, queremos decir la dirección, o el cariz
que toma nuestra energía.
Todos tenemos una determinada energía,
y esa energía la proyectamos hacia los demás.
En psicología sería la transmisión
del arousal, ( nivel de activacion energetica), a través de nuestro cerebro límbico (emocional), que
está compuesto por neuronas espejo, las cuales sin darnos cuenta captan
los estados de animo de los demás,
haciendo que nos sintamos automáticamente como ellos.
El entorno en el que nos
encontramos, también dispone de una calidad energética,¿ no os ha pasado alguna
vez cuando habéis salido de algún centro comercial, que os habéis sentido muy
bajos de energia?, pues eso hace referencia, a la baja calidad energética de estos sitios,
y a la mezclas de energías que hacen que te “roben” tu propia energía, sintiéndote
así de cansado después.
O sin embargo,¿ no habéis conocido
alguien que solo con mirarla a los ojos, tu estado subía, te sentías
pletorico/a junto a ella, y deseabas no separarte?.
Os puedo asegurar, que mi ultima
experiencia fue muy gratificante en este aspecto, estando en madrid, en el tren de regreso a casa,
conocí a una chica, y solo conversando con ella un par de palabras, y mirando
a sus enormes ojos marrones, me sentía atraído, abducido, hacia a ella, tenía
un fuerte magnetismo, que en principio no podía saber a que se debía. Luego a
medida que la conversación se fue alargando, y fuimos personalizando más, me dí
cuenta que era una persona
tremendamente feliz, y sus ojos brillaban como lo de los niños, cargados de
ilusión, el día de su cumpleaños cuando sus padres, le dan los regalos.
Era una persona con pasión, pasión
por su vida, por todo lo que hacía, y esa pasión, no deja de ser energía, ella
vivía en un estado continuo de flujo, en el cual, todas las actividades que
realizaba le reportaba placer, y esa armonía, me la trasmitía con solo mirarla.
Esta persona me hizo recordar, cuan
importante es la energía, ya no la atracción física, o la compatibilidad, la
cual tanto buscamos.
Por ello, en el amor y en la
amistad, hay que cuidar mucho, con quien nos relacionamos, tenemos que incluir a
personas que nos aporten, o al menos que no nos roben.
¿Cómo podemos detectarlo?, simplemente por su actitud, ante la vida , los demás, y sobre
todo, debemos escuchar a nuestro cuerpo, y entender las señales que nos manda. Ya
que sin darnos cuenta, muchas veces, incluimos a personas energéticamente no
compatibles con nosotros, ¿y que sucede después?, pues que nos sentimos
abrumados, y no sabemos porque, y lo que ocurre es que esta otra persona,
probablemente sea un vampiro energético, que sin darte cuenta te agote,
teniendo a largo plazo unas repercusiones que pueden ser arduas.
Por ello os invito a reflexionar
sobre este tema, y sobre todo a que cuidéis siempre vuestro estado energético,
ya que de ello va depender la calidad de vuestras emociones, y por ende, la
calidad de vuestra vida y la felicidad. Evitando situaciones, lugares o
personas, que sabemos que no nos hacen bien, y potenciando aquellas, que nos
multiplican y nos hacen felices con solo su presencia.
Hemos de aprender a dar a nuestra vida una singladura (rumbo o direccion) donde los demas nos aporten y estimulen continuamente y nosotros a ellos. Es la aventura del vivir.
Javier Vergara en colaboracion con Pan Hours
Psicologo